El paciente acude a la consulta adoleciendo de hinchazón y con sensación de movilidad del elemento 2.5, que había sido sometido a tratamiento endodóntico 10 años antes. La movilidad adolecida le impedía llevar a cabo una higiene oral correcta de la zona interesada. El control radiológico muestra una fractura radicular vertical, el sondaje vestibular se revela muy profundo, mientras en el plano mesial y distal casi no se produce. Se opta, por tanto, por levantar un colgajo con espesor total y extraer el diente. La lesión resulta muy amplia, sobre todo en la zona periapical, donde el poste radicular ha fracturado la raíz. Después de la extracción del elemento, se opta por una regeneración con una combinación de hueso autólogo y hueso bovino desproteneizado (DBBM), junto con amoxilina y cubierto con una membrana reabsorbible OSSIXTM Plus. A los 7 meses se opta por posicionar un implante Prama RF, sumergido hasta la porción cilíndrica del cuello convergente, y se posiciona de inmediato un provisional obtenido por el rebasado de resina de una corona individualizada preparada en el laboratorio. A los 3 meses es posible proceder con la inserción de la prótesis definitiva con cierre en el cuello del implante, que finaliza el caso tal y como se había programado. A los 3 años los tejidos duros y blandos resultan estables y gozan de un estado de salud perfecta.