El plan de tratamiento prevé la inserción de un implante Prama 4.25 x 11.5 y una corona temporal de carga inmediata. Ya en el control de 30 días se puede ver que la curación de los tejidos blandos está avanzando extremadamente favorablemente, sin embargo, la papila aún no ha terminado su proceso de maduración.
Después de 7 meses de la cirugía, se realiza la corona final: gracias al cuello intramucoso del implante Prama ha sido posible manejar los diferentes niveles óseos de manera óptima y obtener una cicatrización completa, en la que las papilas han cubierto completamente los espacios a su disposición eliminación, sin tener que recurrir a ningún injerto o material adicional. El control radiográfico confirma el perfecto mantenimiento del nivel óseo.