Scientifica implantología

Numeri Uno 13, 2012, 16-18.

Las técnicas de expansión ósea, pensadas para aumentar los volúmenes óseos peri-implantarios utilizando el hueso nativo del sitio destinado a acoger el implante y el uso de los bone expander para estabilizar los implantes en estructuras óseas de tipo 3 y 4, son técnicas muy bien documentadas, reconocidas por los clínicos y por la literatura como válidas y seguras. El punto crítico de estas técnicas, que recoge el protocolo, es el uso de un martillo quirúrgico para guiar los instrumentos a la hora de crear el alveolo óseo implantario. El golpe producido por el martillo quirúrgico puede provocar en los pacientes un síndrome vertiginoso que puede ser muy molesto y que permanece a veces durante un tiempo. Para evitar o reducir esta sintomatología de forma sumamente significativa, Sweden & Martina introdujo en el mercado el año pasado el Magnetic Mallet, un instrumento magneto-dinámico constituido por un manípulo que recibe energía de un alimentador electrónico que controla las fuerzas y los tiempos de aplicación. La finalidad es vincular los bone expander al manípulo y transmitir a la punta una onda de choque calibrada en el momento de aplicar la fuerza. El Magnetic Mallet produce una energía mayor con elevadas aceleraciones aplicadas en tiempos muy breves respecto al martillo quirúrgico clásico. De este modo se puede inducir una deformación plástica del hueso que absorbe toda la onda de choque, evitando así crear inercias que puedan afectar al resto
del cráneo. Se han medido, en modelos naturales, las ondas de choque generadas, utilizando el martillo quirúrgico de forma tradicional y utilizando el Mallet:
1) Con el martillo quirúrgico la onda de choque generada fue de 40 Dan (Deca Newton) (Kg 40) por un tiempo de 200 μs; gran parte de la energía obtenida de esta forma no se limitaba a la deformación plástica del hueso sino que iba a influir en toda la masa maxilar; 2) con el Magnetic Mallet la onda de choque generada fue de 130 Dan (130 Kg) aplicados por 80 μs. La deformación plástica del hueso se facilitaba muchísimo y permitía la absorción total de la energía, minimizando la aceleración sobre la masa maxilar. El instrumento ejercita perfectamente la función para la que ha sido diseñado, que es la de hacer más aceptables para el paciente las maniobras efectuadas para dividir la estructura ósea cuando es necesario ampliarla y así crear un alveolo quirúrgico adecuado, en posición y de un espesor que se adapte a las paredes alveolares más críticas (que son la vestibular y la oral) para recibir el implante.

Clinical Implant Dentistry and Related Research, Early View, First Published online on 2012, August, 15th

COMPARACIÓN ENTRE MALLET MANUAL Y ELÉCTRICO EN LA CONDENSACIÓN DEL HUESO MAXILAR PARA LA CARGA INMEDIATA DE LOS IMPLANTES: ESTUDIO A RANDOM

Fueron colocados 138 implantes en 50 pacientes en el maxilar con hueso de tipo D3 y D4. En el Grupo Control se utilizaron osteótomos manuales, en el Grupo Test el Magnetic Mallet. A los 24 meses, la supervivencia del implante en el Grupo Control era del 92,75%, en el Grupo Test del 97,10%. La ganancia de hueso obtenida en todos los pacientes quedó estable a los 24 meses en ambos grupos. Los pacientes sometidos a intervención con Magnetic Mallet no refirieron complicaciones relacionadas con cupololitiasis, condición que se presentó en cambio en dos pacientes operados con osteótomos manuales.

The International Journal of Oral & Maxillofacial Implants, 2012; 27: 1144-50

ELEVACIÓN DEL SUELO DEL SENO MAXILAR CON OSTEÓTOMOS: MARTILLO MANUAL O MARTILLO ELÉCTRICO? ESTUDIO CLÍNICO PROSPECTIVO

120 implantes fueron colocados en 80 pacientes en concomitancia con la elevación del seno, que fue efectuada en el Grupo Control con osteótomos manuales y en el Grupo Test con Magnetic Mallet. La supervivencia total de los implantes a los 24 meses era de un 98,33%, la recuperación de hueso era,
en media, de aproximadamente 4 mm, sin diferencias significativas en los dos grupos, y dicha recuperación, observada después de los primeros 6 meses, era
estable a los 24 meses. 3 pacientes sometidos a intervención con osteótomos manuales lamentaron cupololitiasis, mientras que el uso del Magnetic Mallet no dio lugar a complicaciones.

Clinical Implant Dentistry and Related Research, Early View, First Published online on 2012, January, 11th

EL MALLET ELÉCTRICO PRESENTA VENTAJAS FUNDAMENTALES EN LA CONDENSACIÓN ÓSEA DEL MAXILAR. ESTUDIO CLÍNICO PROSPECTIVO

36 pacientes recibieron 50 implantes con técnica osteotómica manual (Grupo Control) y con Magnetic Mallet (Grupo Test). En la revisión de los 12 meses la altura del hueso había aumentado significativamente en ambos grupos, y en el siguiente control de los 24 meses dicha altura había permanecido estable. 2 pacientes del Grupo Control habían sufrido de vértigo paroxístico benigno tras el uso de osteótomos manuales. A los 24 meses la supervivencia acumulativa era del 96%; la recuperación ósea no presentaba diferencia en los dos grupos. El Magnetic Mallet ha ofrecido ventajas clínicas importantes para los pacientes en la fase posquirúrgica.

Dental Cadmos, 77(10): 31-40, 2009

TÉCNICA DE ELEVACIÓN DEL SENO MÍNIMAMENTE INVASIVA EN EL TRATAMIENTO IMPLANTARIO DEL MAXILAR EDÉNTULO

Se ilustran los resultados obtenidos con una técnica simple y previsible para la elevación de seno utilizando un específico kit de fresas e instrumentos atraumáticos (MISE – Minimun Invasive Sinus Elevation).

European Journal of Oral Implantology. 2011 Summer;4(2):145-52

SERIE DE CASOS DE ELEVACIÓN DEL SENO CON INSTRUMENTOS ROTATORIOS

El uso de la técnica MISE (Minimal Invasive Sinus Elevation) que prevé el uso de instrumentos rotatorios calibrados en profundidad con suma precisión ha permitido en este estudio la introducción de 64 implantes con un éxito del 100%, y una recuperación importante de la dimensión vertical media a los 18 meses. Los pacientes han apreciado la mínima invasión del protocolo y no han advertido dolores o malestar.

Numeri Uno 2014; 01: 20-21

La percepción de éxito en implantología  no coincide necesariamente con los conceptos técnicos involucrados, sino que, en ocasiones, esa percepción se encuentra matizada por las expectativas y deseos del paciente.
El caso que se muestra a continuación, es el de una paciente que desea reponer con implantes su sextante antero inferior, afectado por una patología periapical importante, aunque su mayor preocupación radica en no repetir la experiencia de unos implantes  que le habían sido colocados hace muchos años y que – a pesar de mantener una buena función- mostraban una estética poco agradable derivada de la exposición del metal en los márgenes gingivales.
Considerando que presenta una recesión importante en la prótesis fija de los caninos, el reto profesional  -aparte de la obvia función- se centra en conseguir un perfil de emergencia homogéneo de la futura restauración implantosoportada.
Se realizan las exodoncias y se procede al legrado minucioso de los lechos de extracción y de los defectos óseos resultante de la patología infecciosa.
Se colocan tres implantes Outlink2 de conexión externa de la casa Sweden & Martina con longitud de 13 mm y 4,10 mm de diámetro.
Se procede al relleno de las discrepancias implanto-alveolares y los defectos óseos concomitantes, mediante un xenoinjerto particulado, y se cubre todo con membranas de regeneración de colágeno reabsorbibles. Asimismo se suplementan las zonas de recesión gingivales con una matriz dérmica que se sutura conjuntamente con la membrana y un colgajo de reposición coronal.
Después de tres meses de espera para conseguir una aceptable maduración de los tejidos, se coloca una prótesis implantocerámica atornillada, con unos perfiles de emergencia gingivales que -afortunadamente- resultaron del agrado de la paciente.

Quaranta A., Andreana S., Pompa G., Procaccini M.

LESIÓN IMPLANTARIA ACTIVA PERIAPICAL: UN CASO CLÍNICO TRATADO CON REGENERACIÓN ÓSEA GUIADA CON 5 AÑOS DE SEGUIMIENTO CLÍNICO Y RADIOGRÁFICO

Numeri Uno, 19: 12-14, 2014

TRATAMIENTO IMPLANTOLÓGICO DE LAS CRESTAS FINAS: ¿SPLIT CREST O GBR?

Introducción: Desde siempre, el tratamiento quirúrgico de las crestas alveolares finas es un desafío incluso para los implantólogos más expertos. Las numerosas técnicas quirúrgicas propuestas por la literatura podrían desorientar al clínico a la hora de elegir la técnica quirúrgica correcta que se debe aplicar.
Las principales técnicas quirúrgicas propuestas por la literatura se pueden dividir básicamente en dos grupos:

• Técnicas de Split Crest, con las que se opta por dividir la cresta fina presente en dos partes que se deben ampliar, creando de esta manera un defecto óseo intraóseo delimitado por las dos corticales divididas.
• Técnicas de regeneración, con las que se deja inalterada la cresta fina residual y se aumenta el espesor de la cresta a través de la inserción de un injerto en bloque o particulado, protegido por una membrana o por una malla de titanio.

Las dos opciones terapéuticas son muy diferentes, aunque a menudo consiguen los mismos resultados clínicos.
Describamos pues el caso explicativo de una cresta fina bilateral en posición 12 y 22 imposible de tratar con técnicas de Split Crest, al tener una inclinación vestibular excesiva (“S “ shaped). Para obtener una inclinación implantaria estéticamente correcta, tenemos pues que realizar una regeneración ósea horizontal. Desde hace años en nuestra práctica clínica las mallas de titanio han reemplazado con éxito las membranas no reabsorbibles reforzadas que usábamos antes. Según nuestra experiencia, entre las ventajas de las mallas, destacan un cierre más estable y predecible de los tejidos blandos gracias al anclaje de estos últimos a través de micro-orificios de la malla, una mayor estabilidad y robustez del conjunto malla-implantes-tornillos de estabilización y una reducción notable de las exposiciones tardías respecto a las membranas de Gore-tex.
Conclusiones: Las dos técnicas quirúrgicas, si se adoptan de acuerdo con las indicaciones específicas, han demostrado alta predicibilidad y porcentajes elevados de éxito, dándonos la posibilidad de resolver con una sola intervención quirúrgica casos clínicos complejos y crestas sumamente difíciles.
Según nuestro parecer, las dos técnicas quirúrgicas dependen sumamente del operador y suponen una capacitación correcta así como un uso clínico frecuente para reducir la incidencia de las complicaciones.
Entre las diferentes técnicas quirúrgicas disponibles, optaremos por las técnicas de Split Crest cada vez que sea posible para aprovechar la gran capacidad osteogenética de dos corticales divididas y para reducir al máximo los costes y evitar al paciente intervenciones para descubrir el implante.
Sin embargo, sería necesario evitar las técnicas de Split Crest en los siguientes casos:

• si la cresta que se debe operar es más fina de 2,5 mm según análisis Dentascan;
• si la cresta, independientemente de su espesor, está formada solamente por hueso cortical (situación muy frecuente en la mandíbula);
• si la cresta residual tiene una inclinación demasiado vestibular (que se acentuaría ulteriormente con la división).

En todas estas situaciones optaremos por la reconstrucción ósea tridimensional con mallas de titanio.
De todas formas, se debería aprender y preparar la técnica de reconstrucción con mallas incluso donde se optara por técnicas de Split Crest, visto que permite terminar la intervención con éxito incluso con fractura masiva de la cortical vestibular durante las maniobras de división (rescue technique).
Si se elige atentamente la técnica quirúrgica mayormente indicada para cada caso individual, es posible resolver de manera predecible y con elevados porcentajes de éxito incluso casos clínicos especialmente complejos.

Numeri Uno, 16: 6-9, 2013

ENFOQUE REGENERATIVO SISTEMÁTICO FINALIZADO A LA INTEGRACIÓN MORFOFUNCIONAL EN IMPLANTOPRÓTESIS

El tratamiento implantoprotésico de los sectores con un valor estético muy elevado es particularmente crítico incluso cuando los volúmenes óseos post-extracción en sus dimensiones ápico-coronal y buco-lingual están, básicamente, conservados. De hecho, “solamente” la pérdida de la prominencia radicular y de las papilas es suficiente para provocar déficit anatómicos que, si no se compensan de manera adecuada, influyerán negativamente en el resultado de la rehabilitación protésica. A lo largo de las últimas dos décadas se han desarrollado numerosas técnicas quirúrgicas regenerativas que permiten corregir la anatomía para introducir implantes adecuados en dimensiones, ubicación e inclinación; algunas de estas técnicas son complejas y prevén el uso de membranas junto con biomateriales así como fases quirúrgicas múltiples para poder corregir las alteraciones de los tejidos muco-gingivales inducidas por los procedimientos regenerativos óseos. Además, para tratar un caso individual a menudo es necesario aunar técnicas diferentes ideadas para resolver partes individuales de un problema como, por ejemplo, déficit óseo, dismorfías de los tejidos muco-gingivales, posicionamiento de los implantes o de los pontics, etc. El enfoque sistemático E.S.E., objeto del presente informe de caso, fomenta el restablecimiento morfológico del marco osteo-muco-gingival periimplantario (tejidos óseos y muco-gingivales) a través de una sola fase quirúrgica. Este enfoque usa implantes, pilares y dispositivos protésicos superiores como elementos determinantes de la morfogénesis del tejido periimplantario.